Una especie de pérdida constante del nivel normal de la realidad.


El Pesa-nervios, Antonin Artaud


martes, 27 de octubre de 2009

AQUÍ Y AHORA

Pasamos la página del tiempo, y conservamos el instante en que la imagen queda grabada en la memoria, como si todavía hubiese una remota posibilidad de conseguir una línea horizontal, un tiro en la frente y nada más que el rugido intranquilo de la pantera enjaulada. Eso está bien, eso está mal: por mucho que ataquemos los años y el agua nos niegan la razón, y la costilla invertebrada, y la nación de bandera y pañuelo en ristre, sollozos en cada puerta, puñales en las mejillas; libertad para escuchar y escribir la tierra bajo el océano, la anguila eléctrica descargando una corriente en todas las olas en que pescan los cazadores de gaviotas. Quizá en otro momento, cuando nos hartemos de comer y beber la sangre coagulada de debajo de un vientre arañado por un animal aún sin clasificar dentro de la familia de los mamíferos cetáceos -ángel o perro abandonado, qué más da. Libro abierto, libro cerrado.

2 comentarios:

Anónimo dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
FEDERICO OCAÑA dijo...

Ni se te ocurra